venderle lo peor de Karl Barth), a fin de alimentar a la grey de Dios, solo con transmitir lo que dice. Un alimento tiene que ser asimilado por digestión. Un ateo podría “enseñar” la Biblia, y algunos lo intentan en nuestras escuelas, pero eso no se vale. Porque aquel Verbo fue hecho carne, y tiene que volverse carne en usted; debe ser el carácter piadoso del pastor genuino, o bien, la base de él. A veces decimos que nuestras palabras no se podían oír porque lo que Él era y hacía hablaba con demasiado
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